Cómo crear un espacio de trabajo en casa
Nuestros espacios en casa no están preparados para ser usados a largo plazo, ya que nuestro día a día, es en los proyectos y en nuestra oficina. Desde que debemos trabajar desde casa, por la situación que vivimos a nivel mundial con el coronavirus, supimos que debíamos adecuar un espacio cómodo y funcional, para que fuera llevadero trabajar muchas horas.
Vimos la oportunidad de mejorar un espacio que ya teníamos y a su vez hacer un poco de declutter. Reorganizar un poco las cosas en tu hogar, te ayudará a mejorar el ambiente.
En nuestro cuarto ya teníamos un escritorio que estaba lleno de cosas que no usábamos mucho, con dos sillas no tan cómodas para quedarse sentado mucho tiempo.
¡Mira cómo quedó nuestro espacio de trabajo en casa!
Para que puedas hacerlo tú también, te damos algunos consejos de lo que aplicamos en nuestra casa:
Definimos el lugar: Es recomendable que escojas un lugar donde te den ganas de trabajar. Preferiblemente cerca de una ventana para que tengas una iluminación natural, y donde no tengas que recoger lo que está en tu espacio de trabajo, todos los días. No es ideal que te instales en el comedor, por ejemplo, porque al ser una zona concurrida, tendrás que moverte constantemente.
Nosotros optamos por nuestra recámara, aunque no es ideal para algunos estar tan cerca de la cama, en nuestro caso, nos permite estar aislados y concentrados cuando lo necesitamos. Ahora, si tienes otro espacio como un cuarto de estudio o den, que no compartas con otras personas, es lo ideal.
Cambiamos a sillas más cómodas: sacamos las sillas que estaban en esa mesa y las sustituimos por unas de la mesa de comedor que son mucho más cómodas. Tener una silla cómoda, es clave para evitar estar interrumpiendo tu trabajo por estar mal sentado y terminar con dolores de espalda o cuello. Si tienes la opción de comprar una silla especial para trabajar o usar la que tenías en tu oficina mejor aún.
Creamos un ambiente más acogedor: hicimos el espacio nuestro, colocando fotos personales, una vela, algunos mensajes que nos inspiran y agregamos verde, cortando un par de plantas de nuestro jardín y poniéndolas en un florero.
Organizamos el espacio: Nos aseguramos de tener a la mano todo lo que necesitamos, pero de una manera que se viera lindo. En una caja negra que teníamos, metimos cosas como clipsadora, abre huecos, post its y otros objetos que ocupan espacio. Agrupamos cosas similares como plumas, marcadores y lápices en un vaso, y sólo dejando a la vista lo necesario.
Declutter: aprovechamos la organización del espacio para botar aquellas cosas que ya no nos servían. Movimos libros para el librero de la sala, metimos en una caja cosas que deberían ir a la oficina, botamos papeles y hasta CDs que ya no tenían uso.
Otras opciones
Espera, si no tienes estas opciones no te desanimes, también hay otras ideas que puedes aplicar:
¿Tienes una peinadora? Puedes reorganizar lo que tengas allí en otro lado, piensa en algún lugar provisional y convierte la peinadora en tu escritorio temporal.
Otra opción es una mesa plegable. Sí, de esas de patio o de playa. Puedes colocarle un mantel y ponerla en el mejor rincón que encuentres. Se vale mover muebles y reacomodar la casa por un tiempo si así lo necesitas.
Si lo haces, compártenos una foto del antes y después de tu espacio de trabajo. Puedes etiquetarnos en tus historias de Instagram — @estudiocca
¡Nos encantaría verlo!